No dejes de creer.
No dejes de creer en lo hermoso, en la magia de la vida.
Me toca estar acá, y agradezco hasta el infinito, porque todo me sigue demostrando que el universo es perfecto.
Me toca contarte que hace poquito que te encontraste con la energía, con los colores, con las buenas vibraciones, con gente hermosa que desea de verdad el bien común, porque sabe que es la única manera de que a todos nos vaya mejor.
Hace poco que te encontraste con el amor. El amor de verdad.
Te pasaron muchas cosas. Muchas, más de las que parece que una persona debería soportar durante su vida.
De pronto llegó una llave mágica, poderosa, hermosa. Que crece y se multiplica a cada paso.
Una llave que abrió la puerta de tu mente, de tu alma y de tu cuerpo.
(Es normal, en algún punto a todos nos llegó o nos va a llegar).
La tomaste, y con el fuego que te caracteriza, la hechizaste para que se volviera parte de tu vida.
La hiciste brillar con vos y para vos.
Te encontraste con el verde de la sanación y entendiste (correctamente) que algo hermoso estaba llegando.
Aunque hay algo que es muy importante: lo hermoso no lo decidimos nosotros.
De la misma forma en que uno siembra y la vida florece, de esa misma forma no sabemos cómo, ni dónde, ni cuándo va a florecer.
No dejes de creer.
Y aunque suena consejo, esto es algo que te tengo que contar.
No es una opción, no es algo que vos puedas elegir.
No es una vela que vos puedas soplar.
Vos ya viste cómo funciona el mundo, el fuego de Dios prendió tu candil.
Aunque te desesperes, aunque hagas fuerza nunca vas a poder apagarlo.
Decía un sabio:
"Es inútil que golpees la puerta... ya estamos dentro".
Y todo esto llega, armoniosamente al aprendizaje más grande que tuve en todo este tiempo.
El aprendizaje que me cambió la vida para siempre.
Que me abrió y me sigue abriendo las puertas a cosas tan hermosas como desconocidas.
"Basta de hacer fuerza"
Ojalá pudiera encerrar más significado en esa frase, la cual es una representación de las miles que tiene esa enseñanza.
Y con el párrafo más simple que pueda forjar, voy a tratar de transmitírtelo.
Ojalá te cale tan hondo como espero:
La vida acontece, nos pasan cosas todo el tiempo, y uno tiene que optar.
Tenés que saber que debemos aceptar cada cosa que nos pasa. Pero NO con resignación, sino con Amor. El Amor que contempla y purifica.
Tenés que saber que tenemos la completa sabiduría para optar por lo correcto. Pero atención, porque muchas veces lo correcto NO es lo que más deseamos.
Tenés que saber que con fuerza no vas a poder cambiar nada, nunca. Y cuando hablo de fuerza NO hablo de físico, o violencia, o empuje desbocado. Hablo de ideas anquilosadas que no nos dejan ver la verdad. Verdad y Amor son sinónimos.
Tenés que saber que debemos entregarnos, pero a la vez dar lo mejor de nosotros mismos. Tenemos que vivir con dos certezas indeclinables:
- Nuestro poder es infinito, podemos lograr todo lo que esté de verdad alojado en nuestro corazón. Pero Atención: repetir mil veces una frase no instala cosas en nuestro corazón.
- Somos parte de un todo, y las cosas ocurren en función a ese todo. Nuestros deseos más profundos se van a cumplir, pero no tenemos la potestad de decidir ni cómo, ni cuándo, ni dónde.
Como verás, las dos aclaraciones (repetir una frase y elegir detalles para la concreción de los deseos) vuelven a lo mismo: Por la fuerza NUNCA vamos a lograr nada.
Bonita, más que nunca:
Escuchá a tu cuerpo. De verdad.
Sos sabia, relajá la mente.
Rendite a la vida.
De esa forma tu fuego chispeante, maravilloso y hermosamente hipnotizador se va a transformar en una hoguera calma, fuerte y duradera, que va a abrazar el corazón de los que te rodean hasta el fin de los días.
Por fin entiendo qué significa, y me da felicidad: Te Amo.