jueves, abril 08, 2010

Gracias, viejita...

A veces me olvido que el Maestro está ahí para cuidarnos... por suerte también se encarga de recordármelo, y de las formas mas lindas.

(Y encima, ahora está con Él mi viejita, y se deben estar riendo los dos de mí. Seguro que ya le mostró mis fotos de cuando era chiquito y andaba en bolas, esas que tanta vergüenza me daban... :-)

Quién mejor que el Nano, para dedicarle unas palabras...



No es que no vuelva, porque me he olvidado
de tu olor a tomillo y a cocina.
De lejos, dicen que se ve más claro,
que no es igual quién anda y quién camina.

Y supe que el amor tiene ojos verdes,
que cuatro palos tiene la baraja,
que nunca vuelve aquello que se pierde
y la marea sube y luego baja.

Supe que lo sencillo no es lo necio,
que no hay que confundir valor y precio,
y un manjar puede ser cualquier bocado
si el horizonte es luz y el rumbo un beso.

No es que no vuelva porque me he olvidado:
es que perdí el camino de regreso...
Mamá...


Gracias, infinitas gracias por este momento.
Joao

"... pero cuántas veces te voy a tener que decir que lo único que tenés que hacer es llamarme?"

3 comentarios:

Cassandra Cross dijo...

Con el Nano, lo has dicho todo.
Nomás dejame abrazarte un ratito en silencio.

Cako dijo...

Hey loco, que mas agregar... vos lo dijiste todo.

Un abrazo fuerte man!

Anónimo dijo...

Que lindo momento que me regalaste Juan. Esos momentos que se necesitan, de vez en cuando... Javier "Morrón"